Algunas consecuencias psicológicas de una pandemia

Actualmente, la práctica totalidad del mundo se ha sido afectada por la pandemia del COVID-19. Viéndose la gran mayoría de personas influida de forma directa o indirecta por la implicación de estar vivenciando una situación como ésta. Es probable, que la persona haya padecido o padezca la enfermedad, que algún familiar o conocido se haya visto afectado, que el confinamiento esté repercutiendo de alguna manera en la vida de la persona, que debido a su profesión se vea inmersa en dicha situación…

Son numerosas las situaciones dentro de un mismo contexto. Las mismas, por tratarse de un suceso tan excepcional, van a dar lugar a diversas consecuencias a nivel psicológico para una gran cantidad de personas. A continuación, se mencionarán algunas de estas repercusiones:

• No despedirnos en condiciones de nuestros seres queridos.

La frustración que puede llegar a generar esta situación puede ser muy elevada. Una consecuencia directa del hecho de que no se haya realizado un funeral de la forma habitual a nuestro ser querido. Ya que no nos queda más remedio que experimentar la pérdida de la persona o personas (duelos múltiples), queremos darles la despedida u homenaje que se merecen. Asimismo, puede generar sentimientos de impotencia, culpabilidad y tristeza. Lo cual puede hacer el que duelo por la persona fallecida se complique debido a su intensidad, duración o a ambos. Es de relevancia mencionar, que en el caso de haber sufrido varias pérdidas de seres queridos, esto es un factor para que tenga un lugar la complicación de un duelo.

• Sobrellevar los problemas anteriores con los actuales.

Muchas personas que ya padecían malestar psicológico debido a cualquier causa o a otros problemas no resueltos con anterioridad, se pueden ver más abrumadas de lo norma. Dichas situaciones pueden intensificarse o agravarse a causa del confinamiento o de haberse visto afectado por la pandemia. Tanto a nivel de su salud física o de sus familiares, o a nivel profesional. Otro gran numero de personas, seguía un proceso terapéutico y debido su economía actual o a que tiene preferencia por sesiones presenciales, ha dejado temporalmente dicho proceso. Todo ello, hace que se facilite el incremento del malestar y dificulte la adaptación de la persona a la situación actual. Algunos ejemplos de personas afectadas podrían ser los siguientes:

– Incremento del estrés en personas que ya padeciera estrés laboral.

– Incremento de las preocupaciones en personas con enfermedades previas tanto físicas como psicológicas. Muchos tratamientos psicológicos e intervenciones quirúrgicas y médicas se han visto paralizadas de forma temporal. Esto puede ser un factor clave para la salud de la persona a cualquier nivel.

– Preocupación por la economía personal y/o familiar: personas que han perdido su trabajo, personas que estaban en búsqueda de empleo y se ven obligadas a tener menos oportunidades y ajustar de forma considerable sus actividades económicas.

• Empeoramiento de las relaciones familiares con pareja e hijos.

Es normal que una modificación en la rutina diaria de las personas pueda afectar de forma directa a su convivencia y por lo tanto a la calidad de las relaciones. En este caso, es importante no tomar decisiones precipitadas y posponerlas hasta que la situación se normalice de forma completa. Será relevante discernir y reflexionar si el empeoramiento de la relación ha sido una causa directa del confinamiento o factores vinculados con la situación de pandemia. O si por el contrario, se estaba tratando de una relación que de forma previa ya estaba perjudicándonos. Será necesario poner en marcha otro tipo de reflexiones en las que no se procede a profundizar debido a que se excedería del objetivo del presente artículo. Dicho esto, hay que matizar que los casos en los que existe maltrato previo o actual han de ser abordados de otra manera ya que entran en juego factores de otra índole.

• Emociones y sentimientos individuales derivados del confinamiento.

Ansiedad por la incertidumbre y por no salir de casa. Síntomas depresivos debido a pensamientos negativos, por hastío, o por disponer de demasiado tiempo libre a causa de que actualmente la persona está sin trabajar o trabaja menor cantidad de horas. Asimismo, está situación puede conllevar desmotivación tanto en casa como en el propio trabajo.

• Emociones y sentimientos individuales derivados de la profesión u oficio.

Culpabilidad y frustración entre otros. Verse inmerso en la realidad de la situación actual, presenciando experiencias de gran impacto psicológico y teniendo que tomar decisiones relevantes en las que se ven afectadas las vidas de otras personas y de la vida propia. El estrés agudo o el estrés postraumático, van a aumentar de forma considerable a corto y medio plazo. Asimismo, se tiene en cuenta el estrés que supone el esfuerzo extra por parte de los implicados en diversas profesiones y oficios.

Éstas y otras posibles consecuencias que pueden surgir se pueden abordar. En primer lugar, detectando que la persona es susceptible de experimentarlas (por su situación o sus sensaciones y sentimientos). En segundo lugar, dando la importancia debida a la salud psicológica. Actualmente, los servicios psicológicos presenciales no se pueden llevar a cabo de forma general, sin embargo, los servicios online a través de videollamada, siguen dando buenos resultados en las personas que hacen uso de los mismos ya que cada vez mas psicólogos aportan experiencia y adaptan de la manera óptima las consultas en dicha modalidad.

Si necesitas mas orientación al respecto, contacta en hola@rebecapozuelopsicóloga.com o llama al 646837217.